Katy Perry ha hecho historia al convertirse en la primera cantante en participar en un vuelo espacial suborbital. La artista formó parte de la misión NS-31 de Blue Origin, liderada por Lauren Sánchez, pareja de Jeff Bezos, en una expedición compuesta únicamente por mujeres, algo que no se veía desde 1963.
El equipo estuvo integrado por figuras destacadas como la periodista Gayle King, la ingeniera Aisha Bowe, la activista Amanda Nguyen y la productora Kerianne Flynn. Durante los 11 minutos de vuelo, las tripulantes cruzaron la línea de Kármán a 100 kilómetros de altitud y experimentaron la ingravidez.
Perry, entusiasmada por esta experiencia, dedicó su viaje a su hija Daisy, destacando su deseo de inspirar a más niñas a interesarse por carreras científicas. Para la ocasión, recibió entrenamiento intensivo y usó un traje espacial diseñado por Monse y ropa interior creada por SKIMS.
A pesar de algunas críticas por considerarlo un viaje elitista, la misión fue celebrada como un hito en el empoderamiento femenino dentro del ámbito espacial. La presencia de celebridades como Oprah Winfrey y miembros de la familia Kardashian en el lanzamiento demostró el impacto mediático y social del evento.
Este vuelo no solo marca un nuevo capítulo en el turismo espacial, sino que representa un paso importante hacia una mayor representación femenina en la exploración del universo.
