La compañía Red Eléctrica Española ha descartado que el apagón que afectó a gran parte del país el pasado 28 de abril haya sido causado por un ciberataque. Según el informe preliminar presentado por la entidad responsable del transporte y operación del sistema eléctrico nacional, no se han detectado indicios de intromisión externa ni sabotaje digital en sus sistemas.
El corte de suministro eléctrico generó preocupación entre ciudadanos, empresas y autoridades, especialmente en un contexto global en el que la ciberseguridad energética es una prioridad creciente.
La hipótesis de la sobrecarga por demanda de inteligencia artificial
Aunque se ha descartado el ataque cibernético, Red Eléctrica no ha cerrado todas las líneas de investigación. Una de las hipótesis que cobra fuerza es que el apagón podría haberse producido por un pico inesperado en la demanda energética, vinculado al creciente uso de tecnologías de inteligencia artificial.
En los últimos años, el despliegue masivo de centros de datos, entrenamientos de modelos de IA de gran escala y aplicaciones que requieren procesamiento constante —como asistentes virtuales, plataformas de generación de contenido y herramientas de análisis en tiempo real— ha disparado el consumo eléctrico. Según datos de Eurostat y el Instituto para la Transición Justa, el consumo energético de los centros de datos en España ha aumentado más de un 30% en los últimos dos años.
“Estamos observando un incremento abrupto en la demanda energética durante ciertas franjas horarias, especialmente coincidiendo con procesos de entrenamiento y actualización de modelos de IA”, explican desde Red Eléctrica. “Aunque el sistema está preparado para gestionar picos de demanda, una combinación de factores técnicos y un posible error en la previsión de carga podrían haber desestabilizado temporalmente el sistema”.
Elon Musk ya lo había advertido
El empresario y magnate tecnológico Elon Musk, conocido por sus opiniones contundentes sobre el desarrollo de la inteligencia artificial, ya había alertado en varias ocasiones sobre el impacto energético de esta tecnología. En una entrevista reciente, Musk advirtió que “la IA no solo representa riesgos éticos y existenciales, sino también desafíos prácticos inmediatos como el consumo masivo de energía que puede colapsar redes eléctricas no preparadas”.
Sus palabras, en su momento vistas por algunos como alarmistas, cobran ahora un nuevo significado tras el apagón vivido en España. “Si no se regula y planifica adecuadamente el crecimiento de la inteligencia artificial, los sistemas eléctricos sufrirán interrupciones cada vez más frecuentes”, insistió Musk.
Llamado a una planificación energética más adaptada al siglo XXI
Expertos del sector energético han advertido sobre la necesidad de adaptar la infraestructura eléctrica a los nuevos desafíos tecnológicos. La irrupción de la inteligencia artificial no solo plantea cuestiones éticas y sociales, sino también operativas: el sistema energético debe ser capaz de sostener su crecimiento sin comprometer la estabilidad.
Desde el Ministerio para la Transición Ecológica han asegurado que se convocará una mesa técnica en los próximos días para analizar el incidente y definir medidas para evitar futuros apagones. Además, se plantea una revisión del marco regulador para centros de datos y actividades intensivas en energía, con el objetivo de armonizar desarrollo tecnológico y sostenibilidad.
Conclusión
Aunque el apagón del 28 de abril no fue producto de un ataque malicioso, ha puesto de manifiesto la fragilidad de un sistema que enfrenta nuevas presiones. La creciente demanda impulsada por la inteligencia artificial obliga a repensar el modelo energético nacional para que esté a la altura de las exigencias tecnológicas del presente y del futuro —una advertencia que, como señaló Elon Musk, ya estaba sobre la mesa.


